Han pasado tan solo unos días desde la llegada de los últimos militares procedente de Líbano a Extremadura y, este viernes, la Base General Menacho despide a un nuevo contingente de 636 militares, más de 400 de ellos pertenecientes a la Brigada «Extremadura» XI, que en unos días partirá a Letonia. Tres años después, el contingente extremeño regresa a la frontera con Rusia dentro de la misión de la OTAN de presencia avanzada reforzada.
La misión tiene un carácter disuasorio y también especial, por la proximidad con esa frontera rusa, aunque, eso sí, en una zona alejada del conflicto con Ucrania. El jefe del contingente, Pablo Gómez ha lanzado un mensaje tranquilizador para las familias, que han estado arropando a los militares, asegurando que la situación allí es estable.
El acto de despedida ha sido un acto sencillo y también muy emotivo. El primer grupo partirá el 7 de junio y estarán desplegados allí seis meses.