14 Noviembre 2025, 10:29
Actualizado 14 Noviembre 2025, 10:59

El Diario Oficial de Extremadura (DOE) ha publicado la resolución por la que se incoa expediente de declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) a favor de la 'Caza de perdiz con reclamo en Extremadura', con carácter de Patrimonio Cultural Inmaterial.

Según recoge la resolución, la declaración de la 'Caza de perdiz con reclamo en Extremadura' como Bien de Interés Cultural se fundamenta en su "profundo arraigo histórico y social", ya que se trata de una práctica cinegética, con "orígenes remotos y aludida en las primeras normativas de caza en España", que "trasciende la mera actividad recreativa para convertirse en una tradición dinámica con alta representatividad social".

Igualmente, el texto recoge que esta modalidad posee una "fuerte dimensión simbólica e identitaria", vinculando a los cazadores, también conocidos en este caso como 'cuquilleros', con el territorio y los ciclos anuales de la naturaleza, según informa la Junta de Extremadura en nota de prensa.

Cabe reseñar que los saberes y la liturgia de la práctica se transmiten de generación en generación, principalmente de forma oral y por observación dentro del ámbito familiar y se consolidan en el colectivo, reforzando una cosmovisión y un sentido de pertenencia únicos en Extremadura, lo que garantiza la continuidad del acervo cultural, señala.

Esta modalidad, continúa el texto, ostenta un "excepcional valor biocultural y etnológico" por la compleja relación que establece entre el cazador y el ave, aquí el reclamo en una práctica que basa en el conocimiento biológico exhaustivo de la perdiz roja (ritmos ecosistémicos, ciclos reproductivos o lenguaje del canto) y en la intervención cultural para modular la activación sexual del reclamo y sincronizarla con las perdices camperas, generando esta dedicación una relación íntima y prolongada con el ave a través de la doble dimensión espacio-temporal del cuidado anual en el espacio doméstico y el lance de caza en el campo.

De este proceso, concluye la resolución, se derivan saberes fundamentales sobre la selección, el manejo orgánico y la interpretación del canto como lenguaje, conformando una morfología específica de valores culturales y éticos que complementan el vínculo utilitario de la caza.

Finalmente, el texto recoge que esta manifestación es rica en elementos patrimoniales asociados que refuerzan su valor cultural, destacando la producción artesanal de la pieza central, la jaula de reclamo y las arquitecturas de domesticación y de caza de una práctica que ha generado, además, un rico léxico cinegético especializado, clave para la transmisión de conocimientos y la autoidentificación del colectivo.