Con el coronavirus nos auto exigimos una mayor limpieza y desinfección de nuestros espacios. Pero estos hábitos pueden aflorar obsesiones y empeorar a las personas que sufren TOC, trastorno obsesivo compulsivo.
El hijo pequeño de Vanesa Santano, presidenta de la Asociación TOC Extremadura, podía tener lo que llamamos manías, pero durante el confinamiento por la pandemia, la ansiedad le hizo estallar. No quería ni comer. Perdió muchos kilos con 8 años porque aseguraba que los platos estaban sucios, a pesar de que estaban recién sacados del lavavajillas.
Con terapia y el acompañamiento necesario ha mejorado mucho. Por eso, Vanesa decidió crear la asociación para apoyar a todas las personas que sufren este trastorno pero que no lo dicen.
Ahora con la pandemia, el empeoramiento de los TOC es importante. Julia García, psiquiatra, recomienda no ordenarles que se laven las manos veinte veces al día como hacen los demás. Se trata de reducir ese miedo que tienen.
