Las puertas de ARCO han vuelto a abrirse. Y dentro, han comenzado a abrirse otras para artistas y coleccionistas. "A nivel internacional de coleccionistas te da visibilidad y también es una muy buena para los artistas", nos cuenta Pilar Castellano, de la Galería Formato Cómodo. Es una de las participantes, que este año, lleva propuestas de artistas como la pacense Victoria Gil, incluida en la colección del Museo Reina Sofía y del Banco de España.
ARCO es uno de los eventos de arte contemporáneo más importante del país y participan 185 galerías de 30 países. Una feria para el descubrimiento donde no faltan algunos nombres que conocemos bien en nuestra tierra, como Ángeles Baños y Helga de Alvear: "Tengo 85 años, pero mientras pueda estoy aquí porque me encanta", explica Helga, que vuelve a confesar que su vicio es "comprar arte". Un vicio que cobra aún más sentido después del "superlujo" que ha conseguido con la remodelación del museo de arte contemporáneo cacereño.
Porque el arte siempre abre caminos. Y uno nuevo comienza con esta nueva edición de ARCO, superando las dificultades de la pandemia. Ya lo decía el poeta Horacio: la adversidad tiene el don de despertar talentos que en la prosperidad hubieran quedado dormidos.