Una de las medidas para proteger a las mujeres contra la violencia machista son las pulseras telemáticas. Una parte la lleva el maltratador y si incumple la orden de alejamiento, avisa a la policía y al otro terminal, que es el que tiene la víctima.
Protegen a 3.015 mujeres en España. Son los últimos datos que tenemos, del pasado noviembre. En Extremadura la tienen 65 mujeres. Son 14 más que en 2021 pero se trata de un número que contrasta con las 1.799 mujeres maltratadas que tienen riesgo en nuestra región para tener activa una orden de alejamiento. Tienen esta pulsera menos de un 4%.
Un dispositivo que funciona y que evita asesinatos machistas porque ninguna víctima con este sistema activo, ha sido asesinada.
Cómo funciona la pulsera contra los agresores machistas
La pulsera funciona por GPS. En cuanto el agresor condenado se acerca y está próximo a la víctima, se activan las alarmas. El centro COMETA -que monitoriza el seguimiento, por medios telemáticos, de las medidas y penas de alejamiento en el ámbito de la Violencia de Género- recibe estas señales y despliega todos los sistemas policiales y judiciales que la protegen.
¿Quiénes pueden llevar estas pulseras?
Estas pulseras son llevadas por aquellos agresores que tienen una orden de alejamiento. La utilización la tiene que pedir un juez o jueza. Se le coloca una pulsera al agresor, cerca de un dispositivo móvil y a la víctima se le facilita un receptor que intercepta esa señal.
El ministerio recomienda a las víctimas consultarlo con sus abogados. O llamar al 016 si se tienen dudas de cómo solicitar la pulsera. En la web del ministerio también puede encontrarse toda la información.
