Los sanitarios y las sanitarias han sido unos de los héroes de esta pandemia, los que han estado en primera línea de batalla desde que empezó la crisis sanitaria por Covid-19 hace un año. Cáceres fue la zona más castigada en la primera ola del virus cuando no sabíamos a qué nos enfrentábamos. El jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos y de la Unidad Coronaria del complejo Hospitalario de Cáceres, Basilio Sánchez, nos ha contado su experiencia en estos últimos 12 meses.
“Se contagian varios de los compañeros de UCI y Urgencias y le vemos la cara a esta enfermedad."
Sánchez nos dice que es cuando “Se contagian varios de los compañeros de UCI y Urgencias y le vemos la cara a esta enfermedad.. a partir de ahí fue una avalancha de pacientes covid”. El jefe de cuidados intensivos de Cáceres considera una suerte poder abrir el Virgen de la Montaña para atender pacientes.
Y es que cuando la situación en Cáceres era la más complicada de la región y la presión hospitalaria aumentó, se hizo necesario un centro nuevo, y se decidió reabrir el hospital Virgen de la Montaña. Un complejo que se convirtió en un alivio para los grandes hospitales de la ciudad que veían como cada día se multiplicaban sus ingresos.
El 24 de marzo llegaban las primeras ambulancias con los primeros pacientes covid desde el San Pedro de Alcántara. Allí estaba esperando Ángel Maria Durán, médico jubilado que se puso al frente del centro si pensarlo un instante. Hasta el Virgen de la Montaña llegaron enfermos de covid que venían mayoritariamente de residencias de mayores, quizás los más vulnerables.
“Lo más difícil era la soledad de los pacientes, la mayoría ancianos, muchos dementes. Y era terrible verlos morir sin ningún familiar…”
Dice Durán que “Lo más difícil era la soledad de los pacientes, la mayoría ancianos, muchos dementes. Y era terrible verlos morir sin ningún familiar…”
Este hospital cacereño necesitaba todo tipo de recursos para ponerse en marcha, y también llamaron a Cristina Blasco, a punto de jubilarse pero que coordinó la enfermería de este centro en el momento más crítico.
“Esto era ensayo error, no sabíamos como estaba funcionando esta maldita pandemia…”
Para Cristina los inicios fueron muy duros: “Esto era ensayo error, no sabíamos como estaba funcionando esta maldita pandemia…”
En enero el hospital Virgen de la Montaña volvía a abrir por segunda vez sus puertas para pacientes covid en la tercera ola de la pandemia, pero en este momento está cerrado aunque preparado para otra posible necesidad de apertura.
En Badajoz esta tercera ola hizo prever la necesidad de poner en pie un nuevo centro sanitario para albergar a la gran cantidad de pacientes de coronavirus que requerían ingreso hospitalario. En febrero el Hospital provisional estaba listo para recibir pacientes en la Institución Ferial de Badajoz, en IFEBA. Afortunadamente la presión hospitalaria bajó y sus instalaciones no han tenido que recibir pacientes. Hemos recorrido con su ingeniero Carlos Sánchez los pasillos de este hospital que se levantó en tiempo récord.
“Lo pusimos en marcha en 8 días… ha sido un reto..."
“Lo pusimos en marcha en 8 días… ha sido un reto.. era cuestión de echar horas y que los materiales llegaran a tiempo, ha habido materiales que llegaron de Francia y Estados Unidos…"
Junto a Carlos también trabajó duro en el montaje del Hospital provisional, Eduardo Jiménez, director médico del Hospital Universitario de Badajoz y encargado de la coordinación del montaje de IFEBA.
"Si al final es necesario en un futuro próximo lo tenemos ya preparado"
“Era una salida fuera del ámbito hospitalario… Si al final es necesario en un futuro próximo lo tenemos ya preparado... esta situación de estrés y de presión nos ha llevado a tenerlo todo listo y nos da una tranquilidad para enfrentarnos a nuevas oleadas.”
Muy cerca del Hospital Provisional está el Hospital Universitario de Badajoz allí Luis López se puso al frente de la Unidad de Cuidados Intensivos cuando comenzaba la pandemia. Una UCI en la que trabajan muy duro para salvar vidas.
López recuerda “en los pacientes al ingresar en la uci las caras de miedo, los familiares se despedían dándote más ánimos a ti que tu a ellos.”
Los sanitarios han sufrido “Desgaste físico y moral y hemos aprendido a entendernos muy bien dentro del hospital” dice López, que recuerda “en los pacientes al ingresar en la uci las caras de miedo, los familiares se despedían dándote más ánimos a ti que tú a ellos.”
Son sólo algunos de los testimonios de los grandes héroes de esta pandemia. Más que nunca se ha demostrado que su trabajo es esencial para cuidarnos a todos.
