En pocos días se despejará la incógnita. Sanidad ha anunciado que esta misma semana decidirá qué pasa con los casi dos millones de trabajadores esenciales menores de 60 años (más de 30.000 en Extremadura) que fueron vacunados con la primera dosis de AstraZeneca. Personas a las que, por ahora, se veta la segunda dosis después de varios episodios de trombos en personas (mujeres, principalmente) de mediana edad.
Una decisión que, según ha avanzado la ministra, Carolina Darias, tendrá en cuenta los estudios propios, encargados al Instituto Carlos III, y las experiencias de otros países, que han decidido inocular la segunda dosis, pero de la vacuna de Pfizer.
Expectación entre los afectados
Los afectados en la región reconocen que ya tienen ganas de saber qué pasara con ellos. Es el caso de Paz y Cristina, ambas docentes.
A la primera, la vacunaron en marzo sólo tres días antes de la primera suspensión. Y a pesar de que tuvo efectos secundarios severos (cefaleas muy fuertes), está convencida de ponerse la segunda dosis, si así lo aconsejan los expertos. "Yo creo que me la pondría aún así, porque tampoco tenemos muchas más alternativas".
"Si me dieran a elegir, preferiría la segunda dosis de AstraZeneca, pero me pondré la que decidan"
Cristina fue inoculada, una vez se retomó la vacunación con la farmaceútica británica. Reconoce que tenía muchas ganas, que no dudó ni un instante y confía en poder completar la pauta. "Estando en la situación que estamos, creo que debemos confiar en los profesionales y los expertos. Si me dieran a elegir, preferiría la segunda dosis de AstraZeneca, pero me pondré la que decidan".
Y como ellas, muchos trabajadores esenciales (también, los 94 vacunados por error esta semana con AstraZeneca en Cáceres) que quieren certezas en un proceso que ha estado salpicado desde el principio por la polémica.