Esta mañana las cocinas de restaurantes como Albalat o Eustaquio Blanco, ambos en Cáceres, no han parado. La variante omicron y el aumento de positivos no han podido con todas las reservas. Ambos restaurantes reconocen que ha habido muchas cancelaciones, con lo que ello conlleva para los negocios, que ya tienen las compras hechas y el personal contratado, pero también han sido muchas las familias que se han animado a comer fuera de casa. Tal es así que en algunos han rozado el completo mientras que otros, depende también de la incidencia de contagios de cada municipio el porcentaje de mesas ocupadas ha sido considerablemente menor, como el caso del restaurante Agustín, en Gévora.
Mesas con menos comensales
Sí reconocen que el número de comensales se ha reducido. Ya es raro ver en un día como hoy familias de más de diez personas. El número de asistentes suele rondar los 5 o 7, "los más allegados", nos dicen.
En cuanto al menú, predominan los mariscos y pescados, aunque también son muy demandados los productos de la tierra, sobre todo, carnes y quesos. Otra opción para muchas familias ha sido encargar la comida a estos restaurantes y reunirse con la familia en casa.
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