El futuro de la Central Nuclear de Almaraz sigue en el aire y con él, el trabajo de cientos de personas. Por ello, el comité de empresa de la central se ha reunido hoy con el presidente de la Diputación de Cáceres. Los trabajadores reclaman una negociación urgente y aseguran que Almaraz no tiene alternativa y por ello, es imprescindible prolongar su funcionamiento.
El presidente del Comité de Empresa de la Central Nuclear de Almaraz, Borja Romero García, ha pedido al Gobierno y a las empresas propietarias que se sienten a negociar la prórroga de la vida útil de la central, cuyo cierre de sus dos reactores está previsto para 2027 y 2028. Romero ha asegurado que la central cacereña está preparada "desde el punto de vista técnico" para "seguir fusionando un montón de años", al igual que otras centrales de Estados Unidos, que han sido programadas para 80 años.
"Se han hecho un número importante de inversiones a lo largo de los últimos años que permiten poder producir de manera segura, fiable, eficiente, incluso con condiciones de mayor seguridad que al comienzo de la vida útil de la central", ha ratificado el representante de los trabajadores.
Miguel Ángel Morales insiste en la importancia de la central para la provincia
El presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, ha recordado la importancia que la central nuclear tiene para la provincia por la cantidad de empleo que genera en la comarca, por lo que ha pedido a las empresas que están explotando Almaraz, que soliciten la prórroga y al Gobierno "que sea consecuente con la importancia que tiene en la creación de empleo, en la creación de la economía y de la fijación de la población al territorio, por tanto, que acepte la prórroga una vez que las empresas lo soliciten".
"Mientras no haya una respuesta contundente a efecto de seguir manteniendo empleo, riqueza y población en el territorio, la institución provincial defiende los intereses de los ciudadanos de la provincia y no defiende ni a las empresas, ni defiende al interés económico de nadie, ni defiende al Gobierno, defiende a la ciudadanía, a la población y, en este caso, también a los trabajadores y a la cantidad de gente que vive de la central nuclear de Almaraz", concluyó Morales.