El Servicio Extremeño de Salud tiene dificultades aún para recuperar los niveles de actividad asistencial anteriores a la pandemia tras el estrés al que, tanto estructuras sanitarias como profesionales, se han visto sometidos por la COVID-19.
Y es que las listas de esperas en el sistema sanitario extremeño, durante el mes de septiembre, se situaron en 102.794 pacientes. Unas listas que, eso sí, se aligeraron en 14.526 pacientes desde junio de este 2021.
"Todavía nos cuesta recuperar la actividad, todavía cuesta mantener las plantillas al cien por cien, todavía cuesta mantener una actividad adecuada y similar a la de años anteriores"
Los pacientes que más tienen que esperar son los que están pendientes de una operación. De media lo hacen 153 días. Durante el pasado mes había 26.161 personas esperando para ser intervenidas. Son 4.200 más que en el pasado mes de junio.
Para la consulta con un especialista, el tiempo medio de espera es de unos 91 días. En septiembre eran 45.568 los pacientes que esperaban a ser citados.
Elevado es también el tiempo de espera para pruebas diagnósticas, con hasta 71 días. El mes pasado eran 13.485 las personas que estaban esperando a realizarse una de estas pruebas.
Desde la Junta insisten que las listas de espera seguirán bajando hasta finales de año. Desde el SES reconocen que, tras año y medio de pandemia, hay dificultades en la actividad sanitaria. "Todavía nos cuesta recuperar la actividad, todavía cuesta mantener las plantillas al cien por cien, todavía cuesta mantener una actividad adecuada y similar a la de años anteriores", ha reconocido este lunes el director general de Asistencia Sanitaria del SES, Vicente Alonso Núñez. Lo ha hecho en la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales de la Asamblea, en la que ha comparecido, a petición del Grupo Parlamentario Ciudadanos
El envejecimiento de la población, el consumo excesivo por parte de algunos pacientes, ha dicho Alonso, y la escasez de profesionales, entre otros factores, están detrás de estas listas.
Por su parte, la oposición cuestiona la gestión de la Junta de las listas de espera. Critican que más de 20 millones de euros consignados en las cuentas de este ejercicio no hayan resuelto, dice, este problema.