El tiempo avanza y deja huella en cada gesto, en cada costumbre. ¿Cómo han cambiado las Navidades? Algunas escenas ya no se repiten, otras han encontrado nuevas formas, pero entre recuerdos y presente hay algo que resiste: la ilusión de celebrar.
Hace décadas, la despedida del año se vivía en la puerta de la iglesia, escuchando las campanadas por la radio. En los años 70, las casas se llenaban de familiares y amigos, guitarras y villancicos hasta la madrugada. Tradiciones como pedir el aguinaldo o esperar el mensaje del Rey en Nochebuena marcaron generaciones.
Hoy, las Navidades son distintas: Papá Noel y los elfos se han sumado a la fiesta, las calles se llenan de gente y las redes sociales marcan tendencia con villancicos en TikTok. Hay preuvas, tecnología que conecta a miles de kilómetros y hasta inteligencia artificial en las celebraciones.
Cambian las formas, pero se mantiene lo esencial: las ganas de compartir y crear recuerdos. Porque mientras se va un año y empieza otro, la Navidad, como siempre, vuelve.