La Junta de Extremadura ha convocado la primera oposición adaptada para personas con discapacidad intelectual. La prueba de camarero-limpiador se ha realizado este sábado en el Centro Universitario de Mérida y tras el asesoramiento de la Oficina de Accesibilidad Cognitiva y Lectura Fácil de Extremadura (OACEX) han acondicionado los espacios y el examen ha sido de lectura fácil.
A la entrada, los aspirantes se han encontrado con carteles de diferentes colores que les ha facilitado su acceso y les ha permitido identificar perfectamente el aula. Una vez dentro también se han expuesto pictogramas para señalizar las clases.
En declaraciones a Extremadura Noticias, Cristina Sepúlveda, Coordinadora de Empleo de Plena Inclusión Extremadura, explica que "es la primera vez que asesoran al tribunal sobre cómo hacer un examen accesible. Es fundamental que la frase esté bien estructurada, que se usen palabras sencillas y que el tamaño de la letra sea la correcta para que se entienda y se lea bien. Estamos muy contentos con el resultado". Pequeños consejos que facilitan la comprensión a todos los opositores y un gran paso para el colectivo de las personas con discapacidad.
"Es la primera vez que asesoramos al tribunal sobre cómo hacer un examen accesible"
La Administración regional ha tomado nota y con su colaboración han adaptado la oposición para la que se ofertan dos plazas de camarero-limpiador. Carmen Paz es Jefa de Servicio de Selección de la Dirección General de Función Pública y destaca la buena sintonía entre las dos partes. "Estamos muy satisfechos porque se ha facilitado el acceso a las pruebas a las personas con discapacidad desde el inicio de la convocatoria. Es un punto de partida y tenemos que seguir avanzando y ponerlo en marcha en futuros exámenes".
"Tenemos que seguir avanzando e implantarlo en futuros exámenes"
Una vez que ha finalizado la prueba gran parte de los opositores se han mostrado satisfechos porque ha sido de lectura fácil, han recibido una información idónea y han podido realizarla sin dificultad. Además, nos cuentan, que se han preparado bien el examen porque Plena Inclusión lo ha adaptado a sus necesidades y por primera vez han contado con un temario de lectura fácil, por colores, con frases más sencillas, dibujos acordes con las funciones que desarrollarían, apéndices con las palabras más complejas, y que ha sido validado por una persona con discapacidad intelectual.
Finalmente de las 92 personas que se habían inscrito en esta convocatoria se han presentado 46 aspirantes.