Los vimos en tractor y a pie, cortando calles, carreteras y hasta autovías. En febrero, arrastrado por las protestas de Francia, el campo estallaba: agricultores y ganaderos levantaban la voz contra las políticas que, aseguraban, estaban acabando con el sector primario.
Lo hacían de manera independiente, alejados de las organizaciones agrarias. Protestas que consiguieron abrir la puerta del Ministerio de Agricultura y negociar un decreto de 43 medidas.
Ignacio Huertas, de UPA-UCE, explica que han firmado el acuerdo con el ministro "para que esas medidas entren en vigor cuanto antes".
"Responden a la mayoría de los problemas y de las reivindicaciones que veníamos realizando"
Por ello, para UPA UCE es momento de parar y esperar que las medidas se cumplan. Opinión que no comparte Juan Metidieri, de APAG Extremadura ASAJA.
"Son 43 mentiras más para el campo extremeño"
Metidieri advierte de que "la única medida destacable es que va a haber explotaciones de menos de 10 hectáreas que están exentas de cumplir la condicionalidad", y apunta que "todos sabemos perfectamente que esas explotaciones están ubicadas hacia la zona de Cataluña".
La Unión de Uniones también acabó firmando el acuerdo con el Ministerio. Pero Luis Cortés señala que las protestas han parado porque el campo afronta ahora sus campañas más importantes, y avisa de que "las reivindicaciones se tienen que cumplir antes de fin de año".
"Si estas reivindicaciones no se cumplen, los tractores volverán a las carreteras y a las calles de Mérida y de Madrid"
Habrá que esperar para ver si esas 43 medidas se materializan y ayudan a un sector que supone el 7% del producto interior bruto de Extremadura.
