A sus 56 años Lola, nombre ficticio, ha sufrido la violencia de género en dos ocasiones. Hace 20 años se separó de un marido violento y después sufrió otro episodio de malos tratos que acabó con una orden de alejamiento. Lo peor, dice, fue la incomprensión de su entorno.
"Uno no se separa por gusto, lo hice por sobrevivir. Yo casi nunca digo nada porque a veces me siento como un un bicho raro", nos cuenta Lola. Ella sufre una discapacidad física.
Como en el caso de Lola, el 67% de las extremeñas con discapacidad, encuestadas el año pasado por el Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad de Extremadura (CERMI), asegura haber sufrido violencia de género, la gran mayoría, psicologico. "El 95% es un maltrato psicologico de control, el prohibirles hacer determinadas cosas, salir...", asegura Sofía Mas, responsable del proyecto SAVIEX.
SAVIEX, servicio de apoyo a las víctimas pionero en nuestro país
Las mujeres y niñas con discapacidad no solo tienen más dificultad para identificar un caso de violencia sino también para comunicarlo y buscar recursos de ayuda. Para acompañarlas en el proceso el CERMI ha puesto en marcha este año SAVIEX, un servicio de apoyo que acompaña a las mujeres en todo el proceso.
"Para nosotros será de gran ayuda, porque muchas veces nos encontramos con dificultades para comunicarnos con estas mujeres, si ya de por sí una victima sufre un estrés postraumático, imaginaros una mujer con algun tipo de discapacidad intelectual", asegura Martín Martínez, agente del equipo VioGen de la Guardia Civil.
El servicio, que es pionero en España, ya atiende los primeros casos en Extremadura y podría extenderse a nivel nacional a través del CERMI.