A 'Soldado', este joven lince de dos años procedente del Valle del Matachel, al sureste de Extremadura, se lo encontraron los propietarios de una finca cercana a Córdoba cuando se daba un festín dentro de un gallinero. Desde entonces espera en un centro de recuperación de la Junta de Andalucía, donde volverán a liberarlo en breve.
'Soldado' ha recorrido más de 150 kilómetro. Aunque no es el primer caso de lince viajero, su aventura supone todo un éxito para el programa de conservación de la especie en Extremadura.
"Corre más riesgo, de atropellos y otras cosas, pero es una garantía de que existe ese flujo genético"
Su estado de salud es perfecto y la progresión que ha mostrado revela la buena salud de la población felina de nuestra región, que ya casi suma 200 ejemplares de los cerca de 1.200 totales que hay.
Por eso se sigue trabajando en reforzar otras áreas para su reintroducción, como las conocidas zonas de conexión. Entre ellas, el Parque Natural de Cornalvo, cerca de Mérida, donde ya hay varios moradores. También se trabaja para mejorar los sistemas de radiofrecuencia que eviten atropellos. A día de hoy solo un tercio de los animales cuenta con esta tecnología.
Este año, cinco linces han sido atropellados en algunos de esos puntos. Gracias a estas señales, "Regreso" ha podido sobrevivir y se recupera en el centro de cría de Zarza de Granadilla.
