11 Noviembre 2025, 21:37
Actualizado 11 Noviembre 2025, 21:37

Los suplementos alimenticios se han convertido en una tendencia que invade redes sociales y hasta los lineales de los supermercados. Vitaminas, colágeno, creatina…la oferta es amplia y cada vez más personas los consumen, muchas veces sin saber si realmente los necesitan. Esta práctica, además de suponer un gasto innecesario, puede generar efectos adversos.

Entre quienes los toman, las razones son variadas: “Para tener más fuerza”, “para el rendimiento”, “para controlar los resfriados”, explican algunos usuarios. Influencers y campañas en redes han contribuido a popularizar su uso, pero los especialistas alertan: no todo lo que parece saludable lo es.

El médico Juan Carretero advierte: “No se pueden tomar suplementos porque alguien te dijo que le fueron bien. Si tienes una alimentación equilibrada —grasas, proteínas e hidratos— no necesitas suplementos. Y siempre, por favor, que los mande el médico”.

El abuso puede provocar problemas como malestar estomacal, diarreas e incluso insuficiencia renal. “No puedes tomar proteína si tienes retención de líquidos porque te vas a cargar el riñón. Ya hemos atendido urgencias por suplementos mal administrados en gimnasios”, añade.

La recomendación es clara: la solución está en la dieta y el sentido común.