El consejero de Sanidad, José María Vergeles, ha manifestado que nunca descartaría el confinamiento de los extremeños como medida para frenar la escalada de contagios y de incidencia del virus covid-19 en Extremadura. "Así lo están haciendo otros países de nuestro entorno", ha dicho. Sin embargo, antes de ordenar a los ciudadanos permanecer en sus domicilios, Vergeles se ha mostrado partidario de agotar todas las medidas que pueden adoptar las comunidades autónomas.
"No descarto el confinamiento, pero no es necesario aún", ha sentenciado Vergeles.
"No descarto el confinamiento, pero no es necesario aún"
El titular de la sanidad extremeña ha reconocido que ésta fue su posición durante la última reunión de la Interterritorial de Salud, donde están representadas las comunidades autónomas y el Gobierno central y donde se coordinan todas las acciones contra la covid-19 en nuestro país.
Efectos secundarios de un confinamiento
En este sentido, Vergeles se ha mostrado favorable a esperar a ver "si sirven" las medidas que se han adoptado recientemente en Extremadura, como el cierre perimetral de todos los municipios extremeños, y luego seguir tomando las decisiones que sean necesarias.
Un confinamiento, ha explicado, tendría varías consecuencias: el deterioro cognitivo y problemas de salud mental relacionados con el estado de ánimo; por otro lado, también habría consecuencias económicas. Por lo tanto, "hay que valorar muy bien si ir o no a un confinamiento", ha declarado. Un confinamiento como el que tuvimos en primavera, no lo aguantaría este país, ha dicho. "A ver si tenemos suerte" y bajan los contagios y la incidencia para conseguir menor número de ingresos y de fallecidos.