Teresa y Eduardo han decidido poner en marcha un bar de cereales en Badajoz
La pandemia ha cambiado por completo la vida de Eduardo Cabalín. Antes del confinamiento vivía en Mallorca con su pareja Teresa, una abogada pacense que ejercía en la isla. Eduardo trabajaba en el sector hostelero, pero el confinamiento primero y las restricciones después le llevaron a perder su empleo.
“Es arriesgado, pero si no lo intentas no sabes si podrás conseguirlo o no”
En paro y sin proyectos, la pareja decidió mudarse a la localidad natal de Teresa y aquí, en Badajoz, empezó su verdadera aventura. Entre los dos están montando un bar de cereales y desayunos en pleno centro de la localidad, el primero que se pone en marcha en Badajoz.
“Es arriesgado, pero si no lo intentas no sabes si podrás conseguirlo o no”, explica Eduardo a María Hernando, del programa Informe Extremadura, mientras le enseña las obras del que será su nuevo local. “Da vértigo porque siempre he trabajado por cuenta ajena”, añade Eduardo, pero le ha tocado emprender en un momento complicado y aun así ha dado el paso.
Apertura inminente
Las obras de su local avanzan a buen ritmo y confían que en 15 o 20 días ya estén finalizadas, por lo que podrán terminar de arreglar los últimos detalles y abrir al público con esta innovadora propuesta hostelera. El plato fuerte de su local serán