Cataluña compra cava base en Extremadura para la fabricación de sus marcas
La falta de lluvias en Cataluña ha obligado a Freixenet y Segura Viudas a aplicar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para los más de 600 trabajadores de su plantilla ante la caída de producción de hasta un 45%, unos ochenta millones menos de botellas de cava.
Esto se traduce en una oportunidad de negocio para los viticultores de Tierra de Barros porque el precio de la uva aumentará al haber poca oferta y mucha demanda. Lo explica Juan Antonio Álvarez, representante de Extremadura en la Denominación de Origen Cava.
"Afecta a todo el sector. Por suerte aquí no hemos tenido problemas de lluvia. Esperamos que la cosecha sea buena y venga con un aumento del precio de la uva puesto que hay mucha demanda. Tanta que no se está satisfaciendo esa demanda".
Así, el cava extremeño podrá llegar a puntos del mercado nacional que hasta ahora estaba ocupado por el catalán. Además, Cataluña necesita vino base para la fermentación de sus espumosos y ese granel lo comprará en la región extremeña. Es un nicho de negocio que facilitará la apertura de Viticava, una nueva bodega en Almendralejo.
Antonio Ortiz, uno de sus promotores, explica que no descarta embotellar cava en un futuro, pero ahora prefiere centrar el negocio en la producción de vino base cava y que el valor añadido se quede en los agricultores extremeños.
Viticava se instalará en los terrenos que antes ocupaba la Cooperativa San Marcos y está ya en contacto con los agricultores para comprar su uva. El valor añadido del vino base es mucho mayor que el que deja solo los racimos.