"Conozco la zona y eso es una ventaja", asegura Juan Jesús Polvillo. Es Agente del Medio Natural y está muy acostumbrado al entorno de la Reserva Regional de Caza de Cíjara - La Siberia. Ayer, por la tarde-noche, los agentes recibieron una llamada de su coordinación para iniciar la búsqueda de una persona desaparecida. Fueron los propios vecinos y familiares del hombre quienes habían dado la voz de alarma, indicando dónde lo vieron por última vez.
Comenzó entonces el trabajo de búsqueda, con cuatro Agentes del Medio Natural, Guardia Civil, y algunos voluntarios. Un trabajo que se prolongó hasta altas horas de la madrugada y que se reanudó en la mañana del viernes. Sobre las 10:30 de la mañana, Juan Jesús pudo finalmente localizar, al pie de una pista forestal, al hombre, de unos 60 años. "Se había desorientado y había pasado la noche a la intemperie. Tenía signos de hipotermia, porque la noche era fresca e incluso habían caído algunas gotas, y probablemente había estado acostado porque tenía la ropa llena de hierbas", reflexiona.
El conocimiento de la zona
Juan Jesús reconoce que la Reserva de Cíjara tiene diferentes zonas: unas más adehesadas y otras de monte bajo, más cerradas. "Por nuestro trabajo, estamos acostumbrados a encontrar a gente que no quiere que la encuentren", comenta, refiriéndose a la lucha contra el furtivismo. "En este caso, sabíamos que una persona que ha pasado la noche fuera, desorientado, estará cansada y buscará zonas más abiertas y con inclinación hacia zonas más bajas". Precisamente, este era uno de los temores que tenían durante las labores de búsqueda: el embalse de Cíjara, pues existía la posibilidad de que este hombre hubiera visto el agua, hubiera intentado cruzarla o se hubiera caído.
Finalmente, todo quedó en un susto gracias a la rápida actuación de los Agentes del Medio Natural y de la Guardia Civil. "Sentí una satisfacción enorme al encontrarlo, y encontrarlo con vida", reconoce Juan Jesús Polvillo, agente de un cuerpo que reclama su inclusión en el 112.