Si este fin de semana visitan Fuente del Maestre no se sorprendan si encuentran una lavandera o un carpintero en su plaza de España. El municipio extremeño viaja estos días en el tiempo para recrear cómo era la vida en Belén en los días previos al nacimiento de Jesús. No faltan las escenas de la Anunciación, el Castillo de Herodes o la adoración de los Reyes Magos.
Y tampoco faltan detalles. Desde la escuela -mapa de Palestina incluido- hasta lavanderas, costureras o artesanos. Toda la escenografía ha sido elaborada durante meses por los alumnos del taller de manualidades de la Universidad Popular Fontanesa y otras asociaciones culturales del municipio.
Dos días y 200 vecinos
Y el Belén sigue mejorando con los años. "Hemos ido aumentando, desde que comenzamos en 2018. Este año por primera vez el Belén durará dos días, pero también hay más participantes, unos 200 vecinos entre adultos y niños", nos cuenta Carmen Sánchez, una de las organizadoras de la Universidad Popular Fontanesa.
Porque aquí todos los personajes son reales, incluidas las ovejas. Solo ha faltado el niño Jesús. "Teníamos un niño, pero ha cogido bronquiolitis, y hemos tenido que tirar de un niño de porcelana", nos cuenta María Pecero, que este año interpreta el papel de la Virgen María.
Degustación de productos extremeños
Los Reyes Magos tienen este año regalos para los visitantes más pequeños, y para todos los que se acerquen al Belén de Fuente del Maestre hay degustación de productos extremeños, desde migas o prueba de cerdo, hasta los dulces más artesanos. "Tenemos roscas, prestines y hasta torrijas, que hemos preparado con mucha ilusión", dice Antonia Moreno, una de las artesanas de la Tahona.
Así que los visitantes salían encantados del Belén, que seguirá abierto hasta el domingo a las siete de la tarde.
