Las carantoñas han vuelto a recorrer las calles de Acehúche. Este año son 65, doce de ellas jóvenes de 16 años, la edad mínima para vestirse como tal. Junto a ellas desfilan 200 “regaoras” o “patanas” con la función de escoltar la imagen de san Sebastián, “regándolo” de confetis y cantando sus Himnos.
El tamborilero, los “tiraores” y la “vaca-tora” son otros elementos identificativos de esta fiesta ancestral, además de mayordomos y mayordomas. Como apunte sobre la mayordomía de este año, y muestra de como esta tradición tiene asegurado el relevo generacional, son grupos de amigas y amigos de entre 25 y 30 años los que se encargan de las actividades propias como es “regar el romero” o “echar la loa al Santo”.
Se espera que entre este viernes y el sábado, día en el que vuelven a salir Las Carantoñas, acudan a esta fiesta de interés turístico nacional, alrededor de 10.000 personas.
Para los vecinos que se visten de carantoñas es un día frenético. Horas antes de la salida comienza el ritual para ir colocando las pieles en su sitio. No es una vestimenta que se coloque de una vez, va por tramos, que luego hay que atar con cuerdas para que sujete bien. Necesita de varias personas que ayudan a la carantoña. Para ellos es un día muy esperado
