El Banco de Alimentos de Cáceres ha comenzado este fin de semana su Gran Recogida Solidaria, una iniciativa que moviliza a cientos de voluntarios en supermercados de toda la provincia. El objetivo es recolectar alimentos y productos de higiene destinados a las 8.000 personas que reciben ayuda regularmente de la organización. Este año, parte de lo recaudado también se enviará a las personas afectadas por las recientes inundaciones en Valencia.
Desde primera hora, el trasiego de personas solidarias ha sido constante en los puntos de recogida. Los participantes tienen dos opciones: donar productos directamente en las cajas dispuestas por la organización o realizar aportaciones económicas en las cajas de los establecimientos.
El presidente del Banco de Alimentos de Cáceres, Juan Carlos Fernández, ha destacado la importancia de esta campaña, ya que las existencias son escasas a estas alturas del año, y la proximidad de las fiestas navideñas hace que la ayuda sea aún más necesaria. Fernández ha subrayado que todos los productos con larga caducidad serán enviados a los damnificados de Valencia.
En 2023, esta misma campaña logró recolectar cerca de 100.000 kilos de alimentos. Este año, esperan superar esa cifra gracias a la solidaridad de los cacereños. Ejemplo de ello es un matrimonio pensionista que ha donado un carrito lleno de productos esenciales. La campaña se convierte en una herramienta vital para aliviar la situación de muchas familias en Cáceres y otras regiones.