Algunos de los chefs que ya cocinan con este aceite
Cuando Huecco empezó su carrera en solitario alcanzó su mayor exposición pública con ‘Pa mi guerrera’, el trabajo con el que consiguió revolucionar el panorama musical español gracias a su fusión de estilos. Tal fue la relevancia que hubo en nuestro país más de 300.000 teléfonos móviles que usaban su música como tono de llamada. El cantante consiguió un Disco de Oro con más de 40.000 copias vendidas.
Iván Sevillano Pérez, el nombre real de Huecco, ha destacado también por su compromiso social que se plasma en acciones como la puesta en marcha de su fundación, a la que llamó ‘Dame vida’, el título de su tercer disco lanzado al mercado en el año 2011 cuyos beneficios donó a proyectos solidarios en Haití y España.
Uno de los ámbitos en los que también trabaja, aunque quizá sea el más desconocido, es el de la producción de aceite de oliva virgen extra bajo la marca ‘La cueva del lobo’, una etiqueta presente en algunos de los mejores restaurantes del país.
La producción de este aceite tiene su origen en Sierra de Gata y Las Hurdes y se limita a unas 1.000 botellas anuales con un precio que ronda los 35 euros por unidad y para las que no se utilizan productos químicos o fertilizantes según explica a través de su web oficial.
Aceitunas 100% extremeñas
Se trata pues de un producto 100% extremeño del que presume por su origen, pues lamenta que existan en el mercado grandes marcas que para ser más competitivas en precios “compren aceites de oliva más baratos en otros países para envasarlos en España bajo su marca nacional”.
“Algunas marcas compran aceites de oliva más baratos en otros países para envasarlos en España bajo su marca nacional”
‘La cueva del lobo’ se produce con aceitunas de la variedad manzanilla cacereña en la almazara ‘As Pontis’ de Eljas, reconocida como una de las mejores de España en el año 2017 y llega a cocinas de conocidos chefs ‘estrellas Michelín’ de todo el país, como Martín Berasategui, Jesús Sánchez o Íñigo Urrechu.
Pero el producto que surge en Extremadura no es relevante solo por su exposición pública o por la fama de su creador, Huecco. También lo es porque como toda su carrera profesional tiene un marcado compromiso social con las personas más vulnerables.
Así, el año pasado entregó más de tres toneladas de virgen extra a unas 3.000 familias en riesgo de exclusión social gracias a una donación al banco solidario de Mensajeros de la Paz. Junto a la periodista Susanna Griso llevó a cabo otra acción social en Extremadura con el objetivo de abastecer durante un año y medio con un litro de aceite virgen extra al mes a 100 familias extremeñas en riesgo de exclusión a través de la asociación ‘El compás’, de Malpatida de Cáceres.
‘Garganta’ el aceite extremeño de la actriz Cristina Plazas que se cuela en Pasapalabra
