Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Puesto Serradilla (Cáceres), han investigado a tres personas como supuestos autores de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos (caza furtiva) y otro de tenencia ilícita de armas.
Los hechos ocurrieron el pasado 21 de agosto, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la posible comisión de un hecho de caza furtiva en una finca situada en el término municipal de Casas de Millán (Cáceres). Durante el dispositivo de localización establecido, los agentes detectaron circulando por una vía próxima al lugar de los hechos, a un vehículo ocupado por tres personas que, al cruzarse con la patrulla, huyó a gran velocidad. Se estableció entonces un operativo de cierre con apoyo de otras patrullas, logrando finalmente interceptar el vehículo.
Durante el intento de huida, uno de los ocupantes había tratado de huir a pie ocultándose entre la vegetación de una finca cercana, aunque finalmente decidió salir y acompañar a los otros ocupantes del vehículo que estaban siendo identificados por los agentes.
En el maletero se hallaron elementos empleados en la caza
En el maletero se hallaron botas de caza usadas, un maletín con linterna acoplable al arma, otra linterna de largo alcance de camuflaje, una emisora y bolsas de gran tamaño, elementos comúnmente empleados en la caza.
Finalmente, los tres individuos decidieron colaborar, mostrando a los agentes el lugar donde habían escondido parte del material utilizado, supuestamente, para efectuar la caza furtiva, entre ellos una caja de cartuchos metálicos, un silenciador y arma de fuego larga (rifle).
El encargado de la finca comunicó al día siguiente a la Guardia Civil la aparición de un muflón abatido en una zona próxima a la carretera, y el 23 de agosto informó de la localización de un segundo ejemplar sin vida. Además, en este mismo enclave, la propiedad había denunciado un incremento de estas prácticas, en el último año, con numerosos animales abatidos sin autorización de los titulares del coto.
Investigados por delitos de protección de la flora, fauna, caza furtiva y tenencia ilícita de armas
Finalmente, tras haber recabado indicios y pruebas relacionados con un delito de caza furtiva, por el supuesto abatimiento de animales sin la preceptiva autorización, en terrenos sometidos a régimen cinegético especial o utilizando armas prohibidas, la Guardia Civil ha instruido diligencias penales investigando a estas tres personas por la supuesta comisión de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos (caza furtiva) y otro de tenencia ilícita de armas.
Las diligencias instruidas han sido puestas a disposición de la autoridad judicial competente en Cáceres.
La Guardia Civil recuerda que conforme al Reglamento de Armas (Real Decreto 137/1993), los silenciadores están catalogados como armas prohibidas en España, por lo que su mera tenencia o utilización constituye un delito sancionado en el Código Penal con penas de prisión de uno a tres años.