21 Agosto 2024, 20:31
Actualizado 21 Agosto 2024, 21:07

Valdelacasa de Tajo viaja al pasado y celebra la Feria del Remolino, una festividad que este año ha incorporado por primera vez la representación de la Trilla. Se trata de un antiguo proceso agrícola que fue fundamental en la vida rural española hasta mediados del siglo XX. Antes de esta recreación, en el municipio han podido disfrutar de un pasacalles con charanga.

La representación de La Trilla

La recreación ha involucrado a vecinos de todas las edades, quienes se han encargado de escenificar las diversas etapas de esta labor: el pateo de la era, la trilla, y la limpieza y recogida del grano. La Trilla era tradicionalmente una actividad que reunía a patrones y obreros para separar el grano de la paja, utilizando caballos o las propias pisadas de los campesinos, dependiendo de la región. Esta labor, que fue una verdadera fiesta comunitaria en la antigüedad, se ha perdido con el tiempo, tras la introducción de trilladoras mecánicas en los años 40.

La Trilla en Valdelacasa de Tajo

Los vecinos han invertido muchas horas en preparar esta representación, pero aseguran que el esfuerzo ha merecido la pena para recuperar y mantener viva una tradición que forma parte de la identidad de Valdelacasa de Tajo. La Feria del Remolino, que se celebra en honor al fin de la trilla, ha sido el escenario perfecto para esta emotiva recreación.

Beatriz Dorado, directora de la obra, explica que esta representación de la trilla son cosas que se están perdiendo y "sobre todo, muchos jóvenes hoy en día no saben lo que hacían sus mayores y esto es una forma de darlo a conocer y de contar la historia de parte de nuestro pueblo".