El consumo de psicofármacos estuvo detrás de 50.000 accidentes de tráfico en la última década. En ese periodo 1.300 personas que perdieron la vida dieron positivo en el consumo de ese tipo de medicamentos. Por Comunidades Autónomas, Murcia, Extremadura y Galicia son los territorios que registraron más incidentes. Son los datos extraídos de un estudio: ‘Medicación y conducción: un cocktail mortal. Consumo de medicamentos entre los conductores españoles (2010-2019)’, realizado por la Fundación Línea Directa.
Medicamentos como antidepresivos, antiepilépticos o ansiolíticos producen efectos que pueden influir en la conducción. De hecho, según un estudio realizado por la Fundación Línea Directa que ha cotejado datos del Instituto Nacional de Toxicología, de la DGT y Fexvial, concluye que, detrás de 50.000 accidentes producidos en los últimos 10 años estuvo presente el consumo de psicofármacos. Este tipo de consumo ha aumentado un 40% en los últimos 3 años, según ha explicado, Mar Garre, directora general de Línea Directa en la presentación del estudio.
Además, 1 de cada 5 peatones implicado en accidentes dio positivo en consumo de estas medicinas. El estudio arroja otro dato: que el 75% de las personas desconoce los efectos que los medicamentos que toma pueden tener. Y los hay que los consumen junto a alcohol o incluso drogas o las dos cosas juntas.
2 de cada 3 conductores que tuvieron accidentes son reincidentes. Por comunidades, Extremadura, Murcia y Galicia son donde más incidentes se registraron de este tipo. El 24% de los extremeños afirma haber sufrido accidentes o situaciones de riesgo debido al consumo de medicamentos.
Desde la Fundación Línea Directa alertan de la importancia de consumirlos siempre bajo prescripción médica y evitar la conducción, si pueden influir en ella. Y recuerdan que, ante un accidente, su consumo puede ser causa de multa, pérdida de puntos e incluso constituir un delito penal.