El Extremadura sigue asentando las bases de su nuevo proyecto. Ayer fue el turno de Jordi Lardín y hoy ha sido el de Manuel Mosquera. El entrenador ha sido presentado esta mañana como el líder del banquillo para las próximas tres temporadas.
Manuel Mosquera ha explicado que la unión y la sintonía que existe ahora mismo entre el presidente, el director deportivo y su propia figura como entrenador, es total. Entre los tres tienen claro que más allá de las metas deportivas marcadas para la próxima campaña, el gran objetivo del Extremadura a nivel institucional es recuperar la identidad.
"Queremos hacer un club que cambie una imagen que se ha podido deteriorar. Queremos cambiar todo de arriba abajo. No es fácil ni lo vamos a hacer de cero a cien, pero lo vamos a conseguir", ha explicado.
Respecto a la confección de la plantilla, Jordi Lardín reconoció ayer que se iban a realizar en torno a cinco fichajes, y hoy Manuel Mosquera ha descrito cuál es el requisito imprescindible que tienen que tener los jugadores que lleguen al club. "Queremos que los jugadores que estén aquí tengan un sentimiento de pertenencia y que vengan para quedarse".
No hay que olvidar que para que el proyecto se ponga en marcha, los azulgranas tienen que solventar primero los problemas económicos que arrastran actualmente. El presidente, Manuel Franganillo, afirmó en el día de ayer que "al 99'99%" esos problemas se iban a solventar antes de la fecha límite establecida (30 de junio).
El Extremadura 21-22 va tomando forma