Firmaron la compra de una vivienda en construcción valorada en 221 mil euros. Un año más tarde la promotora les pidió 238 mil euros por el encarecimiento de materiales. Lo denunciaron y ganaron.
Este es el resumen de lo que le sucedió a unos pacenses que en marzo de 2021 firmaron un contrato de reserva de un piso en una nueva urbanización de Badajoz. Su sorpresa fue cuando la promotora les subió el precio aduciendo motivos y circunstanciales derivados del covid, de la crisis de los contenedores y de la reciente guerra de Ucrania. Argumentaba que el precio había subido más de un 7,5%; es decir, tenían que pagar 17.000 euros más, ha explicado su abogado, Fernando Cumbres.
La gran mayoría de los nuevos inquilinos suscribió esos incrementos, que han llegado hasta los 25 mil euros en algunos casos. "Sin embargo, nosotros hemos acudido a los tribunales para hacer ver que ese contrato de reserva tiene fuerza vinculante entre las partes y que la constructora debe cumplirlo en todos sus extremos y no puede repercutir ese sobrecoste en la construcción de nuestro representado".
La promotora ha sido condenada a suscribir el contrato de compra venta en los términos y precios pactados, en un primer momento. "Por tanto, toda aquella persona que está ahora mismo en un contrato de compra venta y se le venga a imponer una subida injustificada del precio deben de acudir a los tribunales", recuerda Cumbres.
El Código Civil recoge dos opciones: solicitar el cumplimiento del contrato en sus términos originales o pedir el abono de unos daños y prejuicios ocasionados, que pueden ser de hasta el doble, más los intereses de la cantidad pagada como reserva.