En Cáceres, un bando limita a tres metros la distancia para intentar captar la atención de los clientes. Incluye a bares y restaurantes pero también a guías turísticos y agentes comerciales. La medida entra en vigor mañana y pretende reducir el acoso a los turistas y, a la vez, luchar contra la pandemia.
En las zonas más turísticas de la ciudad es habitual ver cómo restaurantes o guías turísticos intentan captar la atención de los turistas que pasean por ellas. Sin embargo, a partir de mañana si el cliente se encuentra a menos de 3 metros ni guías turísticos, ni relaciones públicas ni agentes comerciales podrán acercarse a él. Si lo hacen, se enfrentan a multas de 3.000 euros en adelante.
El Ayuntamiento de Cáceres ha implantado esta medida como protección ante el contagio del coronavirus pero espera que se pueda prolongar en el tiempo.