Villanovense, Coria y Cacereño realizaron en la tarde del martes la primera prueba del COVID-19. Este es el primer paso para poder volver a los entrenamientos y preparar el playoff de ascenso a Segunda B. Una vuelta que tendrá lugar a principios de la próxima semana.
El Cacereño realizó el test en la sede de la Mutualidad que la Federación tiene en la capital cacereña y anunció que todos dieron negativo. El entrenador, Julio Cobos, habló sobre el regreso a los campos. "Mi familia trabaja y está expuesta. A mí no me gusta ser especial". En cuanto al cuadro cauriense, lo hizo en el propio estadio de La Isla. Chencho, también quiere volver a la normalidad cuanto antes. "Garantizándonos la seguridad, tenemos muchas ganas, pero no miedo". Este miércoles le tocará el turno al Extremadura B.
