Las mujeres no han estado desvinculadas siglos atrás del arte de los pinceles: simplemente no se les ha valorado lo suficiente. No lo decimos nosotros, lo dice el Museo del Prado en su exposición 'Invitadas'. El objetivo: que en 130 obras apreciemos cómo era la imagen de la mujer que quería el estado que viéramos.
El retrato de Carolina Coronado representa la imagen de la mujer recogida que quería el Estado
En el siglo XIX y las primeras décadas del XX el Estado compraba retratos como el de Carolina Coronado. En él se ve a una mujer triste, de luto, con mantilla, apesadumbrada por la muerte de su hijo. La obra la firma un hombre, Federico Madrazo. Es una de las formas de la mujer recatada y recogida que quería el Estado que fuera la mujer del siglo XIX. Pero también hemos elegido esta imagen porque es Carolina Coronado, la escritora de Almendralejo, que defendió en sus versos la dignidad de las mujeres.
Las mujeres, relegadas a pintar bodegones o firmar con nombres masculinos
Además de la visión parcial que los hombres mostraban sobre la mujer, el Museo del Prado dedica otra parte a las obras de las pintoras. Pintoras que se veían poco valoradas por el Estado, que era el que compraba la mayoría de las obras. Una de las manifestaciones de esa situación era que, tradicionalmente, quedaban relegadas a pintar cuadros de bodegones o flores.
Incluso había mujeres que firmaban como hombres para que juzgaran su obra por su valía independientemente de su condición de mujer. Es el caso del cuadro Estudio del Natural, del que la prensa destacó su calidad y sus méritos y fue adquirida por el Estado que no sabía que era de una mujer. Es de Concepción de Figuera que firmaba como Luis Lárming, un pseudónimo que utilizaba un tío suyo que era escritor. La artista ganó, por su obra, numerosos premios y expuso en distintas exposiciones por firmar como si fuera un hombre.
'Del Prado al Valle' el proyecto que ha abierto la mirada a las mujeres del Jerte
En Extremadura también encontramos un proyecto con el Museo del Prado en el que las mujeres también son las protagonistas. Lo están realizando desde la Mancomunidad del Valle del Jerte: ‘Del Valle al Prado’. 50 mujeres han realizado viajes al museo Madrileño para conocer de primera mano las obras en las que se representa a la mujer rural y como se la trata en el mundo del arte.
Además, han realizado durante un año numerosos talleres artísticos que han concluido en una exposición. Una muestra muy especial que busca reinterpretar con perspectiva de género aquellas obras que no la tienen. La exposición nace con una vocación itinerante para dar a conocer una nueva mirada a la hora de acercarse al arte, una mirada que podrán percibir todas las extremeñas que la visiten no solo aquellas que han asistido al proyecto. Está previsto que se inaugure el próximo 20 de noviembre en Cabezuela del Valle.