El Consejero se ha referido a uno de los brotes notificados este miércoles y ubicado en Navalvillar de Pela. Un brote del que, ha dicho, hará variar significativamente la incidencia acumulada de la región por la elevada red de contactos que ha surgido del mismo.
Se trata de un grupo de 30 esquiladores uruguayos que llegaron a Madrid el 1 de abril y se trasladaron a la región, que han fijado su residencia en Navalvillar de Pela, según ha informado el propio ayuntamiento de la localidad en redes sociales. El primer positivo se detectó el 11 de abril y el segundo, contacto estrecho del primero, se detectó el 13 de abril.
Tras este segundo positivo se realizó PCR a todos los contactos y estas han arrojado 23 casos positivos y 137 contactos. Casos que el SES sospecha que puedan ser de la variante brasileña de la COVID-19 y que ya estudia el Ministerio de Sanidad. Los resultados se conocerán el lunes
Estos trabajadores se han movido, durante estos días, por hasta 34 explotaciones ganaderas de Esparragosa de Lares, Madrigalejo, Puebla de Alcocer, La Coronada, Navalvillar de Pela, Talarrubias, Logrosán. Almoharín y Alburquerque. El SES mantiene vigilancia estrecha en todas ellas.
Los trabajadores se encuentran aislados. De no respetarse este aislamiento, el consejero ha asegurado que se tomarían medidas policiales.