Este lunes se han puesto en marcha las llamadas desde los centros de atención primaria a los 3300 elegidos, 1860 elegidos por la provincia de Badajoz y los 1440 por la de Cáceres. Se busca comprobar la incidencia del COVID-19 sobre todo en pacientes asintomáticos, para conocer quienes podrían ser ya inmunes. Los primeros resultados podrían estar disponibles a principios de junio, y es que el muestreo se desarrollará en tres oleadas, con intervalos de 21 días entre ellos. Es importante que los elegidos acepten las pruebas, porque sino se pierde ese estudio de seroprevalencia.
Análisis de sangre y anticuerpos de suero
Si finalmente da el consentimiento positivo, comienza un proceso que consiste en realizar un cuestionario breve. A continuación se lleva a cabo un test rápido que consiste en un análisis de sangre extraída del dedo. Esta prueba presenta un 80% de fiablilidad, pero para afinar el diagnóstico se hará una prueba de anticuerpos de suero. La realizará personal sanitario especializado, mediante un pinchazo en el brazo. Se busca así comprobar cuanta gente ha desarrollado anticuerpos para organizar la desescalada con datos más fiables y concretos.