Extremadura se ha consolidado en estos cien días de la invasión de Putin como zona de tránsito de refugiados.
La mayoría, con destino Portugal, buscando familia y amigos que tras la disolución de la Unión Soviética y la anexión de Crimea, se instalaron allí.
Después de cien días en guerra, el éxodo, según el vicepresidente segundo de la Junta, empieza a remitir. “El éxodo ha caído muchísimo con la venida de personas afectadas por la invasión rusa de Ucrania”, ha asegurado José María Vergeles.
“El éxodo ha caído muchísimo con la venida de personas afectadas por la invasión rusa de Ucrania”
Por nuestras estaciones ya han pasado 1500 ucranianos. Y unos 600 han solicitado quedarse y permanecer en nuestra región, según el último dato revelado por la Junta de Extremadura. En total, más de 4 millones de personas, según ACNUR, han tenido que dejar sus vidas, y huir de su país.
Albergue de Olivenza
En marzo, el albergue municipal de Olivenza (Badajoz) se transformó en espacio de acogida temporal para refugiados. Cruz Roja ha derivado hasta allí a 45 refugiados. Especialmente madres con hijos. Nada más instalarse, todos ellos reciben apoyo sanitario y psicosocial. En una segunda fase, se trabaja por facilitar su integración. ”Estamos trabajando con ellos en la búsqueda activa de empleo, formación y conocimiento del idioma”, nos ha contado Víctor Domínguez, portavoz de Cruz Roja Extremadura.
”Estamos trabajando con ellos en la búsqueda activa de empleo, formación y conocimiento del idioma”
En este tiempo ya hay familias que han encontrado en Extremadura una nueva vida. Con un trabajo, un piso de alquiler y con sus hijos inscritos en alguno de nuestros colegios.
Cien días de guerra y horror
Entre fuego de artillería y más destrucción, la invasión de Putin a Ucrania cumple este viernes cien días.
El Ejército ruso ya controla el 20% del país y ahora su objetivo se ha dirigido a la región del Dombás.
Lo que comenzó siendo una operación militar especial ha dejado miles de muertos en ambos bandos. Soldados muertos. También civiles. Asedio a ciudades. Son algunas de las consecuencias más nefastas de una guerra, que según Naciones Unidas, nadie ganará.
La guerra en Ucrania se originó en 2014
