Un total de 327 municipios extremeños (84,2%) han perdido población en el periodo comprendido entre el año 2000 y el 2018. De ellos, en 136 localidades (41,5%) han perdido más del 20 % de su población. Por su parte, en 61 localidades de la región la población ha aumentado en este siglo, según un informe de la consultora de comunicación Stratego.
De acuerdo a este estudio, realizado en base a los datos del Instituto Nacional de Estadística relativos a 2018, se registra un importante trasvase de población de los pequeños municipios a las grandes ciudades. En concreto, los municipios de menos de 10.000 habitantes han perdido 55.986 personas frente a las ciudades de más de 10.000 habitantes, que en este periodo han ganado 59.429 habitantes.
Por provincias, Badajoz registra 676.376 habitantes, lo que supone 14.502 habitantes más que en el año 2000 (2,2 %), frente a los 396.487 de la provincia de Cáceres, con una pérdida de 11.059 habitantes (-2,7 %). De esta forma, el peso de Badajoz en la población es del 63 % frente al 37 % de la provincia de Cáceres, lo que supone que se esté agrandando la brecha poblacional entre ambas provincias, llegando a los 26 puntos.
Extremadura cuenta, según datos del INE de 1 de enero de 2018, con un total de 13 municipios que superan los 10.000 habitantes. Estas poblaciones suman un total de 529.331 habitantes, o lo que es lo mismo, el 49,3 % de la población, mientras que los restantes 375 municipios extremeños (el 96,6 %) se reparten solo el 51,7 % de los habitantes. De estos 13 municipios, todos, a excepción de Coria, han visto incrementada su población desde el año 2000 con una media de crecimiento del 11,1 %, lo que supone 59.429 personas más. La ciudad que más habitantes ha ganado en lo que llevamos de siglo XXI ha sido Badajoz (14.394), seguida de Cáceres (13.833), Mérida (8.874), y Almendralejo (5.858). En el extremo contrario está Coria, que ha perdido nueve habitantes.
En términos porcentuales, la que más ha aumentado su población ha sido Almendralejo, con un 21,2 % más, seguida de Don Benito y Mérida, con un incremento ligeramente superior al 17 %. En la provincia de Cáceres, la capital ha crecido un 16,8 % mientras que Navalmoral de la Mata lo hace un 15,7 %. En cuanto a las 217 localidades de menos de 1.000 habitantes (55,9 % del total), 119 de ellas tienen menos de 500 habitantes.
Con menos de 100 habitantes se sitúan 10 municipios, cuando en el año 2000 solo había un municipio en toda la región que estaba por debajo de la centena. Ese municipio era El Carrascalejo (Badajoz), que era el que menos población tenía con 73 habitantes. 18 años después ha perdido seis de sus vecinos, pero ha dejado de ser el pueblo menos habitado de la Comunidad Autónoma. En el año 2018, el municipio más pequeño de Extremadura, en cuanto a habitantes, es Campillo de Deleitosa, con 62 personas empadronadas. Ha perdido más de la mitad de sus vecinos desde el año 2000, puesto que al inicio del siglo tenía 132 habitantes.
Le siguen en esta lista de ayuntamientos menos poblados los de Ruanes (65 habitantes), El Carrascalejo (67), Benquerencia (77), Cachorrilla (78), Pedroso de Acím (85), Berrocalejo y Robledillo de Gata (91 habitantes ambos), Garvín (98) y Valdecañas del Tajo (99). De los 15 ayuntamientos menos poblados de Extremadura, 14 corresponden a la provincia de Cáceres y solo uno (El Carrascalejo) a la de Badajoz.
Además, hay 30 municipios que han perdido la barrera psicológica de los 1.000 habitantes en este periodo, pasando de 187 a 217 entre el año 2000 y 2018. En cuanto a los pueblos que más habitantes han perdido proporcionalmente, Valdecañas del Tajo es el que ha sufrido un mayor descenso de población con el 65,1 %, pasando de los 284 habitantes a principio de siglo a los actuales 99. El segundo municipio que más habitantes ha perdido ha sido Descargamaría (58,3 %), seguido de Campillo de Deleitosa (53,03 %), Galisteo (51,99 %), Robledillo de Gata el 48 % y Casares de las Hurdes el 46,9 %, todos en la provincia de Cáceres. En términos absolutos, la que más habitantes ha perdido han sido Talayuela (-2.099), Castuera (-1.294), Moraleja (-1166), Cabeza del Buey (-1.053) y Zalamea de la Serena (-1.041).
Por el contrario, entre los municipios extremeños que han ganado población se sitúan 61 localidades y la que más ha subido, porcentualmente, ha sido Romangordo, con un incremento del 40 %, pasando de 185 habitantes a 259 en el periodo 2000/2018. Le sigue muy de cerca Saucedilla (39,7 %) y tras ellas se sitúan Millanes (30 %), Abadía (21,3 %), Almendralejo (21,2 %) Belvís de Monroy (20,7 %) y Sierra de Fuentes (20,5 %). Las que han ganado más población en términos absolutos, como se indicaba anteriormente, han sido las grandes ciudades (Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia, Don Benito y Almendralejo).
TEXTO: EFE. FOTO: EFE.
