Oriente Medio no es el principal mercado de Extremadura. Las exportaciones allí no llegan al 0,5%, unos 15 millones de euros, y son a países que se mantienen, por el momento, al margen del conflicto. Pero preocupa la posible escalada de los precios del petróleo, que puede acabar afectando a toda la economía. Irán es uno de los principales productores de crudo del mundo.
Cada vez que ha habido un conflicto en Oriente Próximo se ha producido un encarecimiento del precio del petróleo a nivel internacional. La posible contrarréplica de Israel a Irán podría escalar el conflicto y, además del desastre humanitario, provocar una crisis económica mundial. "Eso provocaría no ya una crisis como la del 73, sino probablemente peor, y ya digo que esa crisis del petróleo de los años 70 duró toda la década. Podríamos entrar en una crisis profundísima desde el punto de vista económico en todo el mundo", asegura el profesor de relaciones internacionales de la UEX, Manuel Morán.
Los actuales precios del petróleo ya son altos por el conflicto en la zona, según la Asociación de Estaciones de Servicio de Extremadura, pero la implicación directa de Irán podría dispararlos. "Estamos muy preocupados sobre la evolución del conflicto que hay ahora mismo entre Irán e Israel. Cualquier movimiento que haya se traduce en los precios que nosotros podemos ofrecer a nuestros clientes", afirma el presidente de la asociación, Fernando Mena.
Si la espiral de violencia crece, con Israel apoyado por Estados Unidos e Irán apoyado por Rusia, las implicaciones son ya impredecibles.
