Analizar desde múltiples puntos de vista la posibilidad de implantar la semana laboral de cuatro días sin perder productividad es el objetivo de la cumbre internacional que se celebra en València, que reúne a políticos, sindicalistas y profesionales de la economía, del derecho del trabajo, las políticas de género y la tecnología-.En la imagen,la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz interviene en el acto.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha reivindicado este viernes la necesidad de ir hacia "la flexibilidad en el tiempo de trabajo", más que hablar de la jornada de cuatro días semanales, que en su opinión es una formulación "rígida".
Díaz, que ha participado en Valencia en una cumbre internacional sobre la semana laboral de cuatro días, ha indicado que más allá de la jornada de 32 horas hay "muchas otras manifestaciones" que cabe explorar, como los permisos para personas con dependientes a cargo o los paréntesis para formarse o para viajar con la garantía del puesto de trabajo.
"Hablamos de la soberanía del propio tiempo", ha manifestado la ministra, quien ha insistido en que hay que contemplar varios aspectos de la jornada laboral que tienen que ver con la reducción del tiempo de trabajo, que ha de ser "en cómputo semanal y sin reducción salarial", pero sobre todo con la flexibilidad.
Díaz ha apostado más por un "diseño integral" y por mirar más hacia los modelos nórdicos, donde por ejemplo existen "bolsas de horas" de los trabajadores y las trabajadoras, en las que ellos y ellas pueden disponer de su tiempo de trabajo y lo pueden pactar y negociar.
Más de 13 millones de horas al mes sin retribuir
Díaz ha hecho hincapié en la situación de las horas extraordinarias, ya que en España se hacen más de 6,2 millones de horas extraordinarias a la semana son más de 27 millones de horas al mes" y "la mitad de ellas están sin retribuir", por lo que ha anunciado que en breve se creará un algoritmo en la Inspección de Trabajo para perseguir esas horas que no se pagan.
Ha reivindicado que el tiempo de tiempo de trabajo no se puede separar del "tiempo de la vida", y por ello el Gobierno de España va a desarrollar una ley de usos del tiempo, que tendrá una "mirada ambiciosa, compleja y lo va a poner patas arriba todo".
Díaz recuerda que en España la jornada de 40 horas semanales lleva "muchísimo tiempo" y ha señalado que hay que hablar de la reducción de la jornada, pero también de un nuevo planteamiento de los permisos, por ejemplo para poder tener excedencias para los trabajadores y las trabajadoras que deseen ir a formarse a otro país un año.
"El tiempo de trabajo es el todo y yo creo que no se trata tanto de una jornada a cuatro días, que es una formulación rígida y yo me siento más cómoda en las formulaciones flexibles, cuanto que abordemos en su conjunto el tiempo de trabajo", ha señalado.
La ministra ha señalado finalmente que en España hay un diferencial negativo de productividad con la Unión Europea y el tiempo de trabajo y la presencialidad del mismo, y el alargamiento de la jornada es uno de los factores que está muy estudiado.