El Ministerio de Trabajo pone en marcha un plan contra la temporalidad fraudulenta que ha convertido en fijos 61.000 contratos temporales en tres semanas. Una campaña que ha recibido con recelo la organización agraria La Unión. Su dirigente, Luis Cortés, considera inviable convertir en fijos a los temporeros y atribuye la campaña "al desconocimiento del gobierno de las peculiaridades del trabajo en el campo". Por eso han pedido una reunión con los responsables del ministerio para explicárselas.
Plan de lucha contra el fraude que apoyan los sindicatos, que llevan años denunciando el abuso de los contratos temporales. CC.OO. cree que muchos jornaleros deberían ser "fijos discontinuos". También UGT, quien señala que hay empresarios agrarios que prefieren "un jornalero explotado a un trabajador con derechos".
La tasa de temporalidad es uno de los grandes problemas del mercado laboral español. Es la más alta de la Unión Europea. De hecho casi la dobla. En España el 24 por ciento de los contratos son temporales frente al 13 por ciento de media europea.