La Comisión Europea ha enviado hoy a la Presidencia belga un documento con las primeras medidas que proponen para ayudar a reducir la carga administrativa de agricultores y ganaderos. El documento se debatirá con los Estados miembros en el Consejo de Agricultura del 26 de febrero.
Un documento que es la respuesta a las protestas agrícolas que de Francia se extendieron a otros países y que se desarrollan a pocos meses de las elecciones europeas.
Entre esas propuestas está simplificar algunos requisitos medioambientales que deben cumplir para beneficiarse de la PAC o reducir las inspecciones a cultivos y granjas hasta el 50%. Reconocen que los estándares básicos obligatorios son difíciles de aplicar en algunas circunstancias. Estas dos medidas se aplicarían si se aprueban el lunes de inmediato.
También se revisarán los términos fuerza mayor y circunstancias excepcionales que permitirían que no tengan que cumplir los requisitos de la PAC para recibir subsidios en casos que están fuera de su control, como sequías o inundaciones graves, y que suponen ahora penalizaciones.
A largo plazo, los estados miembro revisarían los reglamentos básicos para facilitar el trabajo de pequeños agricultores de menos de 10 hectáreas. Quieren lanzar en los próximos días una encuesta para que agricultores, de forma directa, identifiquen sus preocupaciones y señalen los puntos más complejos y cargas administrativas que ven en esta política comunitaria y en las normas que les afectan.