España no logrará cumplir sus compromisos para reducir los índices de pobreza en 2020. Hay 12 millones de personas en riesgo según el informe elaborado por la Red contra la pobreza en España y tener empleo no asegura dejar de formar parte de este grupo. La mejora de la economía no ha llegado a toda la población. Hay 30.000 personas en pobreza severa. Y por comunidades, entre la región con mejor tasa, Pais Vasco, y Extremadura, la última, hay 32 puntos de diferencia.
Extremadura, destacada en las peores cifras
En nuestra región, el riesgo de pobreza y/o exclusión social llega al 44,6% de la población, en un contraste radical con el País Vasco, donde es de un 12%. Dentro de ese grupo, la población en riesgo de pobreza llega hasta el 37,6%. Es también la cifra más alta del país, aunque bajo 1,2 puntos respecto a 2017, cuando tocó techo. Eso sí, si lo miramos en perspectiva temporal, los datos son desalentadores. Hace una década, en 2008, la tasa de riesgo de pobreza era menor, un de un 35,3%.
Trasladándolo a número concreto de ciudadanos, el año pasado había en la región 403.827 extremeños. Cabe recordar que un ciudadano está en situación 'AROPE' (Riesgo de pobreza y/o exclusión) si cumple alguno de estos tres requisitos: una renta inferior al 60 % de la mediana de la renta nacional, vivir en un hogar que no puede permitirse al menos cuatro de nueve productos de consumo básico o vivir en un hogar con baja intensidad de trabajo. Es en el primer indicador donde Extremadura sale peor parada: la renta media por persona de los extremeños es un 25,5% más baja que la media nacional. En cambio, nuestros pensionistas aguantan mejor: el 31% de nuestras pensiones están bajo el umbral de la pobreza, pero hay otras 8 regiones en peor situación.
Carlos Susías, presidente de la La Red Española de Lucha contra la pobreza, asegura que a pesar del aumento del PIB, los pobres hoy son más pobres que en 2008. Castiga más a las mujeres, apunta, en parte porque son las que forman mayoría de familias monoparentales.
Y ojo, no se arregla solo con dinero. Se necesitan medidas concretas de lucha contra la pobreza y de apoyo a quienes la sufren, porque los índices generales se han estancado: de 2017 a 2018 bajó tan sólo medio punto.
Las cosas, advierten, podríán incluso empeorar por las nuevas formas de trabajo. La Unión Europea le llama atípico, la red le llama precario.
Tres indicadores a examen
El estudio analiza 3 variables, la pobreza realtiva, la baja intensidad de empleo o la privación material severa. analiza este último los alimentos que se puede permitir una familia, si tenene telefono o televisor o si disponen de dinero para alguna actividad de ocio. No es que haya muchos ciudadanos que hayan vivido por encima de sus posibiilidades, es que el 55% de la ciudadanía vive al límite de sus posibilidades.
TEXTO: Laura Cruz
IMAGEN: Canal Extremadura
