Hasta las diez y media de la noche estuvieron los viajeros en medio del campo, junto al tren que había sufrido el "conato de incendio", a la espera de que llegara otro tren para llevarlos a Zafra.
Así nos lo ha relatado una de las pasajeras que viajaba en ese Regional Sevilla-Cáceres, y que quedó parado en el tramo entre Cazalla y Guadalcanal, en la provincia de Sevilla.
A las 22:40h, según RENFE, se inició el transbordo. La compañía ferroviaria destaca "la eficacia del operativo de rescate, y la colaboración de los viajeros durante todo el proceso". Y añade que este tren pertenece a la serie 599, de la que afirma que es "la más moderna de trenes diésel y ha sido revisado recientemente".
Finalmente, los viajeros llegaban a Zafra a las 23:58 horas. Cuatro horas y media más tarde de lo previsto.
Algunos de ellos nos comentaban en ese momento que estaban cansados pero muy contentos de llegar por fin. Explicaban que se dieron un buen susto al ver el humo, y que además el lugar donde el tren quedó parado era de difícil acceso. También señalan que la comunicación allí con los agentes de RENFE fue buena.
Así sucedió todo
En el tren viajaban, además de los pasajeros habituales desde Sevilla, una excursión de más de cien personas formada por padres, madres y niños de diferentes edades del colegio 'Manuel Marín' de Zafra. Afortunadamente, nadie resultó herido.
Los propios pasajeros relataban en la estación de Zafra cómo había sucedido todo:
RENFE envió dos trenes hacia el lugar, uno desde Sevilla para remolcar de vuelta el tren averiado y otro desde Cáceres para recoger a los viajeros y que continuasen su trayecto. Además informó de que iba a proporcionar comida y agua a los viajeros, pero éstos aseguran que sólo recibieron agua.
Las causas de ese conato de incendio se están investigando. Renfe recuerda que aplicará su "compromiso voluntario de puntualidad y devolverá el 100% del importe del billete".
Un "conato de incendio" en el tren Sevilla-Cáceres obliga a evacuar a los pasajeros