Hasta 600.000 euros por saltarse la cuarentena. Si no la cumplen, es la multa a la que se enfrentan en estos momentos alrededor de los 7.000 extremeños que están en seguimiento en nuestra región tras haber dado positivo o haber sido contactos estrechos.
Lola se encuentra en Valencia de las Torres y ha dado positivo en COVID-19 junto a su marido y dos hijos. Los síntomas han sido leves, pero igualmente tienen que cumplir la cuarentena. Asegura que nadie se ha puesto en contacto con ellos para comprobar que la están realizando correctamente tras dar positivo. "El médico se puso en contacto con nosotros para darnos el resultado y decirnos que nada, que para cualquier cosa nos pusiéramos en contacto con él. Gracias a Dios, lo hemos pasado con síntomas leves y no le hemos tenido que llamar en ningún momento", nos ha explicado Romero.
"Me ha llamado varias veces, incluso se ha puesto en contacto con mi médico para facilitarme todos los trámites"
Más llamadas de control ha tenido Sergio que se ha infectado en dos ocasiones. Una en marzo y otra en agosto. "Me ha llamado varias veces, incluso se ha puesto en contacto con mi médico para facilitarme todos los trámites de las pruebas de serología y demás." Se refiere a los rastreadores de Salud Pública que le han controlado, dice, en todo momento.
Para que las multas se cursen es necesario que las fuerzas de seguridad del Estado o los funcionarios inspectores de sanidad o cualquier otra consejería levanten acta del incumplimiento de la ley, tal y como nos ha confirmado el profesor de derecho constitucional de la Universidad de Extremadura, Gabriel Moreno.
Para disuadir a la población del incumplimiento, la normativa ha establecido un procedimiento administrativo especial y rápido. Las infracciones leves se resolverán en 15 días. En ese tiempo se tendrá que pagar, además, la multa de hasta 3.000 euros. Hacerlo se compensará con hasta un 40% de descuento.
