Extremadura
8 Julio 2021, 21:23
Actualizado 9 Julio 2021, 09:54

Las fotos nos ayudan a no olvidar. Eso pretende el fotolibro 'Alma y memoria' de la editorial cacereña Atalaya: que perduren algunas de las fiestas más arraigadas de Cáceres. Y todo a través del objetivo del fotógrafo peruano Jorge Armestar y de los textos de la periodista Israel J. Espino.

Hoy han presentado su trabajo, dejando una imagen inédita en la presidencia de la Junta de Extremadura. Jarramplas, las carantoñas o a los negritos de San Blas... El alma de algunas de nuestra fiestas más arraigadas se han juntado en una fotografía única de todos ellos juntos para esta puesta de largo de 'Alma y memoria'.

Contra el olvido

El libro recoge estampas y momentos de celebraciones ancestrales en la provincia cacereña. Fiestas que durante una década ha captado con su cámara el fotógrafo Jorge Armestar para no perder nuestra memoria. "La despoblación que sale en los telediarios la he visto y la he fotografiado. Es muy importante que no caiga en el olvido, son las raíces de la tierra que me acoge.

Este fotógrafo peruano llegó muy joven a la región y su curiosidad le llevó a retratar las fiestas más emblemáticas de Cáceres. Ahora quiere hacerlo con las de Badajoz. Un viaje para el que cuenta con la pluma  de la periodista extremeña Israel Espino. "Un libro que pretende ser el alma y memoria de nuestros pueblos", especialmente con la ayuda de los mayores.

Algunos de los protagonistas de estas fotografías reconocían con "emoción" su presencia en esta obra para recordar a quiénes vengan lo que son algunas de nuestras fiestas más antiguas. Como Juan Carlos Fernández Sánchez, Jarramplas, que aparece inmortalizado en la última página del libro. O César Garrido, Palotero de Los Negritos de San Blas, "me siento emocionado. Venimos a representar a nuestra cultura".

Un fotolibro que también retrata ritos menos conocidos pero que perviven desde hace generaciones como El capazo de Torre de Don Miguel, a la espera de su declaración de interés turístico regional. 

Un fotolibro para no olvidar

Según sus autores, algunas de las celebraciones de este libro se encuentran en “vías de extinción”, debido sobre todo, a la despoblación de las zonas rurales. Este proyecto quiere convertirse en la llama, todavía encendida, que plasme todo ese acervo popular como legado para futuras generaciones.

Aparecen instantes de La Chicharrona, La Maya, El Capazo, Los Empalaos, Los Escobazos, El Peropalo, Los Negritos, el Carnaval Hurdano, Las Carantoñas y Jarramplas