Base militar de Kulikoro, en el centro de Mali. Dos instructores bajo el mando de la Unión europea forman al ejército maliense, mientras la Unidad de Protección garantiza la seguridad de los militares.
Esta semana es sólo un simulacro, uno de los ejercicios prácticos que se organizan en la Base militar de Bótoa, pero esa será la misión final del contigente extremeño en el país africano.
Proteger a los instructores en Mali
"Estamos preparados para cualquier tipo de incidencia, hemos organizado desde cursos de combate cuerpo a cuerpo hasta actualización de transmisiones, todo para que la misión se desarrolle con la máxima seguridad posible, nos cuenta el teniente Daniel Escudero, jefe de sección de la Unidad de Protección del contigente.
Misión en plena pandemia
La pandemia del COVID- 19 ha obligado a adaptar la misión y reducir el trabajo de instrucción del ejército maliense. La brigada extremeña, que acude por segunda vez a Mali, se encargará de proteger a los instructores, aunque esta vez la situación es más compleja.
"La situación en Mali es de incertidumbre"
A la crisis sanitaria del COVID se une la situación política del país, que es muy inestable. " Han sufrido un golpe de Estado, el gobierno no está plenamente reconocido, así que que hay una inestabilidad política que se suma a la crisis del coronavirus, por lo que la situación es de incertidumbre", reconoce el teniente coronel Sergio Espada, jefe del Grupo Táctico Calatrava que viajará a Mali.
A diferencia de 2015, la Brigada Extremeña acude esta vez al país africano como Grupo táctico y no como sección, por lo que se duplican los efectivos, hasta los 300 militares y sobre todo aumentan sus capacidades.
"Nos preparan para afrontar cualquier tipo de misión, estamos preparados"
Todo un reto para profesionales como el cabo primero David Ruiz, que afronta su tercera misión internacional. "Es una experiencia nueva que te va completando como militar, y a ver cómo nos va". "Nos instruyen día a día para afrontar cualquier tipo de misión, así que estamos totalmente preparados", asegura la sargento 1º Teresa Martín del Burgo.
A finales de noviembre, cuando partan hacia el país africano, tendrán oportunidad de poner en práctica todo lo aprendido estos meses de preparación. La misión internacional de la brigada extremeña en Mali durará 6 meses.