Las ayudas, que suman un total de 3,4 millones de euros, llegarán a 1.800 ganaderos, calcula la Junta.
Todos aquellos que sean titulares de una de las 2.210 explotaciones que sufrieron el virus en Extremadura, siendo algunas de ellas propiedad de un solo ganadero.
En total, 28.684 animales afectados de los que murieron más de 2.000, aunque no está confirmado que todos lo hicieran a causa de la hemorragia epizoótica.
Se darán ayudas de 35 euros por animal afectado, con un máximo de 7.000 euros y un mínimo de 200: es decir, 6 vacas afectadas como mínimo.
La consejera de Agricultura y Ganadería, Mercedes Morán, ha explicado que son ayudas pensadas para cubrir los gastos veterinarios. Y que no se va a pedir certificado. Será requisito, eso sí, que se hayan notificado los casos a una oficina veterinaria oficial o que se haya participado en la encuesta sobre la enfermedad que realizó la consejería, lo cual, según la Junta, garantiza la veracidad de las solicitudes.
Morán ha afirmado que la intención es llegar cuanto antes a los ganaderos, que cobrarán la prestación antes de que termine el año.