Esther Merino ya tiene la Lámpara Minera del Festival Internacional del Cante de las Minas de La Unión, y puede presumir de ser la cantaora más completa de este prestigioso certamen al ganar en todas las modalidades.
El suyo ha sido un premio a la constancia. Ha seguido y ha perseguido el premio durante más de una década. El año pasado rozó el galardón como finalista, igual que en 2016 y 2017.
Su voz y su 'quejío' dominan una carrera plagada de distinciones. Desde el 'Melón de Oro' en el Festival de Flamenco de Lo Ferro, en Murcia en 2017, a todos los premios que consiguió en sus comienzos.
Toda una vida dedicada al flamenco
La cantaora extremeña nació en Badajoz en 1984, vive en Gévora y desde adolescente pisa los escenarios con fuerza. Cada paso que ha dado lo ha seguido el programa de flamenco ‘Entre palos y quejíos’ de Canal Extremadura Radio. Su directora, Laura Zahínos, lleva desde 2008 con la lupa puesta en su potencial. Hoy reconoce que no le ha sorprendido el nuevo éxito de una artista que ha sabido reinventarse. “No me sorprende que se haya traído la Lámpara Minera a Extremadura porque tiene garganta y corazón”, reconoce Zahínos.
“No me sorprende que se haya traído la Lámpara Minera a Extremadura porque tiene garganta y corazón”
Ahora se ha formado en la rama sanitaria lo que ha redondeado, aún más si cabe, su arte flamenco, su trayectoria, y su disco.