A la Junta de Extremadura le preocupa la caída de los activos en 11.400 personas. Son en su mayoría mujeres y estudiantes parados que han dejado de buscar empleo. Efectos de la pandemia en el mercado laboral que, según el secretario general de Empleo, mejorará a medida que se relajen las restricciones. 7000 empleos se perdieron en agricultura y se crearon 2.500 en servicios. A eso hay que sumar las casi 7.000 personas en ERTE, consideradas como ocupados en la encuesta.
Los sindicatos están preocupados y piden medidas para paliar la situación, entre ellas la subida del salario mínimo interprofesional y la derogación de la reforma laboral. Comisiones Obreras de Extremadura ha advertido de que la Encuesta de Población Activa del primer trimestre del año ofrece datos "muy preocupantes", como la "fuerte caída" de la población activa y que las mujeres sufren en casi un 90 por ciento el descenso en 13.300 personas de la población ocupada.
A los empresarios también les preocupa la caída de la actividad. La patronal pide un plan especial al Gobierno de España para reducir el diferencial de la tasa de paro que está seis puntos peor que la media española.
