26 Mayo 2021, 12:57
Actualizado 26 Mayo 2021, 12:57

Tras la reapertura de fronteras, continúa el 'turismo de gasolinera' de portugueses a España. En el país luso el combustible ha subido casi un 25% desde mediados de 2020. Un encarecimiento que se agrava por el recorte en los salarios que ha acarreado la pandemia.

Si ya antes de la pandemia los portugueses aprovechaban para llenar el depósito de sus coches en Badajoz, ahora, tras abrir de nuevo la frontera, se repite el viaje hasta las estaciones de servicio fronterizas. Actualmente, la gasolina en Portugal tiene un precio medio de 1 euro y 60 céntimos y el diésel de 1,39 euros tras una subida de un 25% en el último año. Y aunque baje el precio del petróleo, apenas lo notan porque en torno al 60% del precio son impuestos indirectos. 

Si vienen a repostar a zonas límitrofes como Badajoz, Villanueva del Fresno o Valencia de Alcántara, se ahorran una media de 25 céntimos por litro en la gasolina (12,5 euros en un depósito de 50 litros) y 10 céntimos en el diésel (5 euros en el mismo depósito). Si se vive cerca de La Raya, el viaje merece la pena, más aún si se complementa con la compra de otros productos energéticos que también son más asequibles en nuestro país, como la bombona de butano.