El Obispado de Plasencia anuncia que aparta temporalmente al párroco de la iglesia de San Sebastián, en Don Benito, tras su detención el pasado lunes por presunto tráfico de drogas y haber decretado el juez su libertad provisional, con medidas cautelares.
En un comunicado, el Obispado indica que "a la espera del total esclarecimiento de los hechos y la resolución de la causa, oído el sacerdote, se ha considerado conveniente, en este momento, apartarle temporalmente del ejercicio público del ministerio y de su oficio de párroco de la de San Sebastián, así como de la residencia parroquial, mientras duren las acciones procesales que correspondan".
Por ello "se designará para la citada parroquia un Administrador parroquial", y asimismo "se procurará al sacerdote el seguimiento y acompañamiento psicológico y espiritual pertinente".
Según confirman desde el Obispado, al apartarlo de sus funciones tampoco continuará impartiendo clases en el colegio Sagrado Corazón de Don Benito.
Dolor y consternación
El obispado añade que "una vez más, expresamos nuestro dolor y consternación por el sufrimiento y escándalo que los hechos descritos y las circunstancias que lo rodean suponen".
Además asegura que siguen "dispuestos a colaborar con la Justicia en todo aquello que se nos requiera", e insiste en pedir "prudencia y respeto a las personas implicadas que debe prevalecer sobre cualquier otra consideración".